Del mismo modo que no es saludable atiborrarse en fiestas, tampoco lo es sentimente mal hasta por tomar un simple trozo de chocolate. En el equilibrio est la virtud, segn Aristteles, ya nadie le amarga un dulce, sobre todo, en estas fechas entrables. Ahora bien, el educación nutricional y nuestra propia consciencia pueden hacer mucho más por nosotros que los «milagrosos» zumos detox (ya desmontados en ZEN), las pastillas para adelgazar o las peligrosas dietas prohibitivas que provocan ansiedad y efecto rebote.
No en vano, en la última encuesta de la plataforma de salud Top Doctors hacer más ejercicio (50%) y mejorar la salud mental (46%) encabezan la lista de propsitos de los espaoles para este 2023, por encima de adelgazar (18%). La ciudadana se va dando cuenta de que es mejor llevar un estilo de vida activo basado en buenos hábitos y decisiones inteligentes frente a vivir en una dieta eterna y relacionando la comida a las emociones.
¿POR QUÉ ESPERANZA EN 2023?
«Son muchas las personas que consideran el mes de enero como la fecha para iniciar cambios que ya venan soando tiempo atrs, pero ojo! Tambin son muchas las que, llegado este punto, se dan cuenta de que no depende del momento del ao, sino de una misma», apunta ngel Peralbo Fernndez, especialista en Psicologa Sanitaria y miembro de Top Doctors.
Sin embargo, el hecho de poner el contador a cero tras las navidades s ejerce en nosotros cierto presin por hacer las cosas bien, retomar el deporte o iniciar algn proyecto ilusionante. Mucha ambición pero poca motivación provoca que, en la misma encuesta citada, ocho de cada 10 reconozca que solo cumple uno de sus propsitos. Porque lo ideal, indican los profesionales de la salud, es que cada da sea una nueva oportunidad para ser mejores.
«Respecto a la alimentación, hay que estar dispuesto a cambiar y trabajar en el arte de la moderación«, sugiere la Dra. María Carmen Japaz Cancino, especialista en Nutrición y Dietética, sin desconocer que el lugar de comer existe y es fabuloso disfrutar aunque teniendo en cuenta las cantidades y la frecuencia. Porque pasar del todo al nada nos conduce al fracaso.
Segn esta nutricionista, el solo hecho de pensar en evitar salidas con familia y amigos estos das o dejar de comer para recibir una cena calrica nos predispone a excedernos ms. Lo vemos como una restricción absoluta. «Esto es algo que resulta especialmente conflictivo». Muchas personas, cuenta, pasan de atiborrarse en fiestas a commenzar en el ao nuevo a dieta tremendamente prohibitiva, sin permitirse un gusto o capricho. «Temen Loss Control Y Volver Atrs Por Sus Extremas Expectativas».
Además, insiste la doctora, «ese esfuerzo y castigo a nuestro cuerpo no puede estabilizarse en el tiempo». Si pensamos en pequeños pasos desde hoy, no desde comienzo de enero, nos damos tiempo para aprender à gestionar nuestros puntos dbiles en relacin con la comida, aconseje. Un bagaje que se quedará para siempre con nosotros. «Necesitamos tiempo para cambiar y aprender, pero la ganancia en términos de salud comienza desde el primer momento».
LOS TRUCOS DE LOS NUTRICIONISTAS
Para estabilizarse en un peso normal no hay más que una regla. «Ser tratado de ingerir las mismas calorias que las que gastas a lo largo del día», explica Elena Muoz Gómez, Diplomada en Enfermera UAE, que trabajó en Cuidados Intensivos Pediátricos en el Hospital Doce de Octubre de Madrid y certificación en Nutrición Deportiva de Alto Rendimiento por la UCAM.
Si, por un momento, piensas en todo lo que viene un día festivo, como Nochevieja o el día de Reyes, y lo pones en fila, asusta. Por mucho que corras la San Silvestre ese da. Aunque no se trata de andar contando calorias, uno de los consejos ms tiles de Muoz es servir a los hombres en un plato. De este modo, resultará más fácil no pasarse y estabilizarse en una alimentación adecuada y evitar una digestión muy pesada. Porque si empiezas a picar… a veces no hay fin.
Tambin acepta llegar hidratado en la cena: «Nos llenaremos antes si hemos bebido la suficiente agua». Y comer despacio, masticando bien los alimentos. “Leptin, responsable de la saciedad, segrega y empieza a estar alta desde los 20 minutos”, argumentó Muoz.
No debemos consentir que la dopamina sea el alma de la fiesta, alertó el profesional. «El sentimiento de alegra libera en nuestro organismo una cascada hormonal que hace difícil mantener el impulso hedonista de llevarse a la boca un polvorín más al pasar al lado de la bandeja de dulces navideos». Por lo tanto, anima a que solo sea uno en lugar de dos.
LOS DULCES Y EL ALCOHOL
En general, hijo productos tratados. «Pueden estar elaborados industrialmente, a los que añaden aditivos, conservantes, grasas saturadas y grasas trans, aunque por supuesto también los hay de fabricación artesanal», aclara Muñoz, al escuchar esta opción como pero preferible, en ambos casos, con un consumo excepcional.
Por ejemplo, el turrón, asevera Muoz, tiene un calrico de porte medio de 500 kcal/100g de producto, dependiendo de los ingredientes y la diversidad. Un mazapán porcino de aproximadamente 30 g aporta 147 kcal (50% hidratos de carbono, 44% grasas y 6% proteínas). Y el polvorín 695 kcal/100g de producto. “Es progresivamente respetuoso con el resto de dulces navideos se debe a su mayor porcentaje en grasas, tiene un 55% de origen animal, principalmente a base de mantecas que aportan cidos grasos saturados”.
Por un trozo no pasa nada. Pero si empezamos a comernos media bandeja, desaparece el equilibrio entre lo ingerido y gastado. «Se incluye en el grupo de alimentos de Tercer Nivel, constituyendo el punto de La Pirmide de la Alimentacin Saludable propuesta por la SENC (Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, 2015) y su consumo se cataloga como ocasional y moderado».
El contexto acompaña y es fácil caer en la tentación. «El alcohol, repleto de caloras vacas que no aportan ningn Nutritione», tambin destroza esa cuenta. Podemos llegar a 214 kcal por gin-tonic, si tomamos esos 60 ml de medida estándar más una tónica con 16 gramos de azúcar (la OMS recomienda no pasar de 25 gramos al día). Eso sin contar con las gominolas o frutos secos que lo acompañan, y que solemos comer compulsivamente. If you don’t dulce nos ceimos a uno, en este caso es preferible evitarlo en favor de una kombucha, por ejemplo, u optar por las nuevas bebidas con menor graduación (Tanqueray 0.0, Beefeater Light, tnica zero…).
Aquella persona que déarrolla una aptitud adecuada a lo largo del año, con una planificación nutricional equilibrada y una vida activa, no tienda a obsesionarse por coger 500 gramos de peso durante las fiestas, apunta la especialista en nutrición. Pierde inmediatamente. «Cuando existe una estrategia nutricional adecuada cabe un dulce en el hombre y eso no supone una ganancia de peso ni un conflicto personal».
El objeto es el proceso. «Lo fundamental es llevar una vida saludable activa que incluya ejercicio, alejada de las relaciones sociales tóxicas, disfrutando de la alimentación, de las relaciones humanas, de los proyectos cadadémicos y laborales. Siempre construyendo“, concluye Muoz.
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